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El titular de la cartera consideró que se buscará "la forma más simple" para "identificar la trazabilidad de cualquiera de los segmentos del producto: el aparato, su línea y la tarjeta símbolo (chip)". En declaraciones a radio Mitre, Fernández adelantó que en "una primera etapa" se comenzará con los celulares que pagan tarjeta, calculados en unos 30 millones y cuyos portadores "van a tener que registrarse" con nombre y domicilio. Aclaró que ante pérdida o robo del aparato "el número se anula y no va a poder recargarse (en otro celular)" y agregó que "todas las compañías de celulares compartirán la base de datos para "saber cuándo se roba una línea o se pierde" y de esta manera "no permitirá que esa línea opere en el mercado". Fernández agregó que luego "vendrán los de pospaga", es decir los celulares que se pagan mediante factura, y que "en algún momento estaremos todos identificados". Aclaró, además, que todas las compañías de telefonía móvil compartirán la misma base de datos que les permitirá conocer cuando una línea sea robada o perdida por el titular "y no permitirá que esa línea opere en el mercado".