El senador Carlos Reutemann profundizó ayer su distanciamiento del Gobierno. Tras ser dado de alta y después de retirar personalmente los estudios que le hicieron en el Instituto Cardiovascular de Rosario, señaló: "No veo al Gobierno en posición de querer solucionar el problema [con el campo]". Abordado por un grupo de periodistas, Reutemann opinó que "las bases están que arden" por la falta de respuestas oficiales a una sequía cuyo saldo es de "900.000 cabezas muertas", según calculó. "Es un desastre", se quejó."Lo ideal es que el Gobierno hable con la Mesa de Enlace y se entable un diálogo", sugirió el senador, que fracturó el bloque kirchnerista en la Cámara baja por las diferencias con el oficialismo en torno al conflicto con el campo. De esa manera, mostró que la defensa a los ruralistas será un eje de su discurso político en la disidencia del PJ.
Reutemann habló antes de que el Gobierno invitara a los líderes de la Comisión de Enlace a una reunión para el martes próximo con la ministra de Producción, Débora Giorgi. Curiosamente, justo había reclamado que la Casa Rosada designara para el encuentro a una figura con peso político dentro del Gobierno.
"La persona que hable con la Mesa de Enlace tiene que tener poder de decisión porque, si no, se va a producir un diálogo de sordos", dijo, según la agencia DyN. La presidenta Cristina Kirchner, evidentemente, no lo escuchó.
De todas maneras, Reutemann consideró que no resultaba fundamental que a la mesa con los ruralistas se sentara la Presidenta. "Tiene funcionarios expertos que conocen el tema y le tienen que dar alternativas de solución", comentó.
Sobre la carta que anteanoche leyó el vocero presidencial, Miguel Núñez, en la que el Gobierno delató las reuniones secretas que mantuvieron el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, y el presidente de la Sociedad Rural, Hugo Biolcati, el senador evaluó que el kirchnerismo perseguía un objetivo claro: "Están tratando de dinamitar a la Mesa de Enlace. Yo creo que sería un error que [las entidades del campo] dejen de trabajar en conjunto".
Reutemann dijo que existen "condiciones excepcionales en la Argentina" para evitar el derrumbe de la producción agropecuaria, "pero es una decisión política". Apuntó directamente a los Kirchner, a quienes anteayer había considerado responsables por no alcanzar una solución.
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