Si uno se pega en el pulgar con un martillo, ¿soltar una serie de palabrotas en serio disminuye el dolor? De forma automática o involuntaria, insultar en esas circunstancias es algo muy común, si no universal, y un grupo de científicos británicos se preguntó si contribuye a reducir la agonía."En términos científicos -declaró Richard Stephens, profesor de psicología en la Universidad Keele de Inglaterra y autor del estudio- sólo analizamos un tipo particular de dolor. Los diferentes tipos de dolor tienen leves diferencias en términos psicológicos, a pesar de lo cual es probable que el hallazgo pueda aplicarse a todos". Por qué un insulto tiene efectos físicos no está claro, pero los científicos especulan que tiene relación con la forma en que el cerebro trabaja. A diferencia del lenguaje "normal", que se apoya en el lado izquierdo del cerebro, las injurias apelan a ciertos elementos del lado derecho, como la amígdala cerebral, que puede iniciar respuestas físicas y hacer que se disminuya el dolor. Stephens, que pensó en este fenómeno mientras escuchaba las malas palabras que gritaba su mujer cuando daba a luz, señaló que hay circunstancias en que los insultos son adecuados. "No lo recomendaría cuando hay chicos cerca, pero pueden ser de mucha utilidad", concluyó.
Fuente:Asteriscos.tv
No hay comentarios:
Publicar un comentario