Lo importante es entender el mensaje del evento, y no quedarse en la idea de que uno es un Superman que toca la viola."
El hecho del que habla Guillermo Terraza es el intento de tocar la guitarra durante unas 100 horas, sin interrupciones, y establecer una nueva marca en el Libro Guinness de los Récords. Para el músico, el desafío que emprenderá en su ciudad, Comodoro Rivadavia, a la hora cero del próximo miércoles será el quinto (antes fueron 36, 40, 42 y 50 horas) de este tipo."Y el último", asegura.
¿Qué te impulsa a hacer algo así?
El deseo de transmitir un mensaje positivo, de que se pueden superar los obstáculos. Yo he superado muchas cosas gracias a la música. Además, esto tiene, como los anteriores, un carácter benéfico.
Terraza viene de tres generaciones de músicos. "En casa la música era el pan nuestro de cada día", dice. Y la música lo llevó a Italia, donde reside desde hace una década.
"Allí viví el terremoto de Abruzzo en carne propia", cuenta. Y agrega: "Cuando pasó en Haití, nació la idea de recaudar fondos para sus damnificados. Pero estando ya en la Argentina ocurrió lo mismo en Chile, y decidimos hacerlo a beneficio de la gente del país vecino."
¿Cómo se hace para llegar a las 100 horas y no morir en el intento?
Con mucha concentración, conociendo los momentos débiles, y dosificando de una manera adecuada el repertorio.
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