La crisis financiera internacional provocó un quiebre de las expectativas económicas entre los empresarios y siete de cada diez consultados proyectan un escenario de menor actividad para los próximos seis meses, de acuerdo con la encuesta de D´Alessio
Irol presentada en el Coloquio de IDEA.
El relevamiento señala que cinco de esos siete empresarios prevé un escenario "moderamente inferior" para los seis meses siguientes y los otros dos otros un panorama "muy inferior".
Sólo 2,5 por ciento de las respuestas mencionan un horizonte "moderamente superior" y 0,5 una actividad "muy superior".
A principio de año, los empresarios mantenían una expectativa aceptable sobre la marcha de la economía, que luego no tuvo correlato con la realidad por la crisis del campo.
No obstante, finalizado el paro agropecuario, esas proyecciones se recuperaron con rapidez, para volver a caer con la irrupción de la crisis financiera.
La encuesta, realizada On Line y confeccionada con 216 casos, no tomó además el estado de ánimo de los empresarios una vez que el Gobierno decidiera eliminar las jubilaciones privadas, ya que en el momento del anuncio hacia tres semanas que circulaban las preguntas, aclaró Eduardo D´Alessio, titular de la consultora.
Las expectativas cayeron a niveles de la crisis de los mercados asiáticos en 1997 o el default de la deuda rusa, dos años después, aunque todavía muy lejos del pensamiento empresarial con la crisis terminal de 2001.
Más allá de las proyecciones poco alentadoras, el 68 por ciento de los empresaerios no cree que se deberá modificar la planta de personal de su empresa y sólo el 19 por ciento que la disminuirá levemente.
El 6 por ciento que reducirá la nómina de empleados en forma significativa, el mismo porcentaje que la aumentará moderamente y nada más que la incrementará en forma importante.
Al ser consultados sobre los cinco factores de posible crecimiento para 2009, el 44 por ciento mencionó la diversificación de productos y servicios, el 32 por ciento el
abaratamiento de costos, otro 32 la conformación de alianzas estratégicas, el 27 en inversión de nuevas tecnologías, y el 20 por ciento en la exportación.
Irol presentada en el Coloquio de IDEA.
El relevamiento señala que cinco de esos siete empresarios prevé un escenario "moderamente inferior" para los seis meses siguientes y los otros dos otros un panorama "muy inferior".
Sólo 2,5 por ciento de las respuestas mencionan un horizonte "moderamente superior" y 0,5 una actividad "muy superior".
A principio de año, los empresarios mantenían una expectativa aceptable sobre la marcha de la economía, que luego no tuvo correlato con la realidad por la crisis del campo.
No obstante, finalizado el paro agropecuario, esas proyecciones se recuperaron con rapidez, para volver a caer con la irrupción de la crisis financiera.
La encuesta, realizada On Line y confeccionada con 216 casos, no tomó además el estado de ánimo de los empresarios una vez que el Gobierno decidiera eliminar las jubilaciones privadas, ya que en el momento del anuncio hacia tres semanas que circulaban las preguntas, aclaró Eduardo D´Alessio, titular de la consultora.
Las expectativas cayeron a niveles de la crisis de los mercados asiáticos en 1997 o el default de la deuda rusa, dos años después, aunque todavía muy lejos del pensamiento empresarial con la crisis terminal de 2001.
Más allá de las proyecciones poco alentadoras, el 68 por ciento de los empresaerios no cree que se deberá modificar la planta de personal de su empresa y sólo el 19 por ciento que la disminuirá levemente.
El 6 por ciento que reducirá la nómina de empleados en forma significativa, el mismo porcentaje que la aumentará moderamente y nada más que la incrementará en forma importante.
Al ser consultados sobre los cinco factores de posible crecimiento para 2009, el 44 por ciento mencionó la diversificación de productos y servicios, el 32 por ciento el
abaratamiento de costos, otro 32 la conformación de alianzas estratégicas, el 27 en inversión de nuevas tecnologías, y el 20 por ciento en la exportación.
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